Alimentación

Probióticos: ¿qué son y por qué incluirlos en tu dieta?

  • Comparte

Si eres un consumidor regular de yogur y otros productos lácteos, probablemente has notado que muchos contienen probióticos. 

Pero ¿sabes lo que esto significa y cómo influye en tu salud?

¿Qué son los probióticos?

Para tener claridad sobre qué son los probióticos, primero necesitas saber que no todas las bacterias en tu cuerpo son malas. 

Al contrario, tu intestino necesita de cierto número de bacterias, virus, hongos, arqueas y helmintos (en total, unas 300-500 especies bacterianas) para mantener el equilibrio de sus funciones. 

Este ecosistema se llama microbiota, y es muy importante para: 

  • Fabricar vitaminas, incluyendo la vitamina K y algunas de las vitaminas del grupo B.
  • Convertir las fibras en grasas de cadena corta como butirato, propionato y acetato, lo que sirve para alimentar la pared intestinal y realizar funciones metabólicas.

Con esto en mente, los alimentos probióticosse llaman así porque contienen microorganismos vivos que te ayudan a mantener una microbiota saludable. 

Estos probióticos naturales se encuentran en alimentos que han sido preparados por fermentación bacteriana, pero también es posible absorberlos tomando suplementos. 

¿Para qué sirven los probióticos?

Ahora sabes que consumir alimentos con probióticos naturales te ayuda a mantener en equilibrio las poblaciones de bacterias y otros microorganismos en el intestino, pero ¿qué tiene que ver esto con tu bienestar general? 

Puede que la idea de comer productos con microorganismos vivos te parezca extraña, pero tener bacterias intestinales “amigables” se ha relacionado con muchos beneficios para la salud. 

Aquí hay unas cuantas ventajas que explica mejor para qué sirven los probióticos: 

  • Perder peso.
  • Tener una mejor digestión.
  • Fortalecer el sistema inmune.
  • Una piel más sana.

5 ejemplos de alimentos probióticos

Como se dijo antes, el yogur común es posiblemente el alimento donde es más fácil que encuentres probióticos. Sin embargo, no es el único. 

Si quieres comenzar a probar por ti mismo los beneficios mencionados antes, pero disfrutas de tener una dieta variada, puedes incluir en tu alimentación diversos productos hechos a base de fermentación bacteriana: 

  1. Kéfir o yogur de pajaritos: es un producto muy parecido al yogur de toda la vida, pero está hecho de una combinación de levadura y bacterias que luego se añaden a la leche. Esto da como resultado una bebida espesa y con un sabor picante que incluso le sienta bien a las personas con intolerancia a la lactosa, ya que las bacterias disminuyen la concentración de lactosa en la leche.
  2. Tempeh: es un sustituto de la carne que está hecho de soja fermentada. Esta es una opción ideal para vegetarianos y veganos que, además de probióticos, contiene nutrientes esenciales.
  3. Kombucha: es un té fermentado a base de té verde o negro. Tiene una composición gaseosa y un sabor agradable, entre ácido y refrescante, por lo que es muy útil para comenzar a reemplazar otras bebidas poco saludables. Está hecho de té verde o negro fermentado.
  4. Kimchi: se trata de un plato muy popular en Corea del Sur que está hecho de repollo fermentado u otras verduras. Aporta una gran cantidad de probióticos y sirve para regular el colesterol y la resistencia a la insulina. 
  5. Chucrut: consiste en repollo rallado que ha sido fermentado por bacterias de ácido láctico, pero también pueden usarse otras verduras. Tiene la ventaja de ser muy bajo en calorías, y aporta fibra, vitamina C y vitamina K.

La mayoría de las personas responden bien a los alimentos con probióticos, pero es posible que algunos productos te causen gases, dolor abdominal y otras molestias. Si presentas estos síntomas, habla con tu médico, en especial si estás tomando antibióticos.